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miércoles, 2 de mayo de 2012

The Catcher in the Rye



1. Lee lo que verás a continuación y toma apuntes en tu cuaderno acerca de estos temas referentes a El guardián entre el centeno:

  1. Generalidades
  2. Argumento
  3. Título

The Catcher in the Rye fue la primera novela corta de J.D. Salinger. Fue publicada en 1951 y se hizo muy popular entre los críticos y jóvenes. La historia la narra, en primera persona, Holden Caulfield: un adolescente rebelde, inadaptado e inmaduro, pero de gran perspicacia. Se dice de la novela que es la única que ha sabido captar lo que es la adolescencia con todas sus contradicciones; la fórmula del carácter del desorientado protagonista la ofrece su propia hermana, Phoebe, cuando le dice que, sencillamente, no sabe lo que quiere.
Treinta años después de su publicación en 1951, El guardián entre el centeno era tanto el libro más prohibido como el segundo más estudiado como lectura obligatoria en los institutos estadounidenses. En la década de 1990 fue el nº 13 en la lista de libros más leídos en su país según la Asociación de Bibliotecas Americanas y en el año 2005 se mantuvo entre los diez primeros.
Las razones principales por las que este libro fue criticado eran principalmente su lenguaje ofensivo y sus referencias a las drogas, el alcohol y la prostitución. Los críticos ven a Holden como un instigador de masas. Por otro lado, se trata de una novela que ha sido curiosamente citada como favorita por muchos asesinos en serie y otros inadaptados.




Holden Caulfield tiene 16 años y ha sido expulsado por bajo rendimiento de la escuela privada Pencey. En una huida sin rumbo fijo (para evitar explicarle a su padre la mala noticia), el protagonista vive en primera persona los aspectos más bajos de la sociedad. Tiene encuentros con mujeres, un sinfín de decepciones y de situaciones estremecedoras, en un acelerado y corrosivo paso hacia la madurez. Es un chico sin ilusión, convencido de que su paso al mundo adulto es de regresión y no de evolución, que se aburre con todo, y que sólo idealiza a su hermana pequeña Phoebe, increíblemente sensata para su edad, porque representa la última ramita que une a Holden con su infancia.





El título del libro en inglés hace referencia a una reflexión que el protagonista realiza en el libro sobre la letra de un poema, que trata sobre un Catcher (alguien que agarra o sujeta) que evita que “los niños caigan en el precipicio”.
(...) me imagino a muchos niños pequeños jugando en un gran campo de centeno y todo. Miles de niños y nadie allí para cuidarlos, nadie grande, eso es, excepto yo. Y yo estoy al borde de un profundo precipicio. Mi misión es agarrar a todo niño que vaya a caer en el precipicio. Quiero decir, si algún niño echa a correr y no mira por dónde va, tengo que hacerme presente y agarrarlo. Eso es lo que haría todo el día. Sería el encargado de agarrar a los niños en el centeno. Sé que es una locura; pero es lo único que verdaderamente me gustaría ser. Reconozco que es una locura.

La primera traducción al castellano de la obra fue titulada "El cazador oculto"; posteriormente, una traducción española de 1978 tituló la obra como "El guardián entre el centeno". Ese título viene siendo criticado por escritores no españoles desde hace tiempo. Rodolfo Rabanal explicó en 2001:
El guardián en[tre] el centeno es estrictamente literal porque responde a las cinco palabras del título en inglés, pero esa literalidad no beneficia el sentido: más bien lo oscurece. El guardián es el jugador que en el béisbol corre para atrapar la pelota; si ese jugador se encuentra, de manera figurada, en un campo casi idéntico a un trigal, estará evidentemente oculto y fuera del alcance del bateador. En suma, «cazaría» la pelota desde una guarida y se comportaría como un cazador oculto. Ésa es la idea que inspiró el título de Salinger, sólo que en inglés, y en los Estados Unidos, bastaba con la literalidad para establecer la metáfora. Pero en la versión en español era preciso imaginar el propósito de Salinger y dar exactamente la idea que el autor buscaba. Luego se impuso esta nueva versión y el guardián en el centeno ya no suena a nada.

De todas maneras, Salinger desautorizó cualquier otra traducción al castellano, con lo que el primer título, que fue la única versión en español durante décadas, nunca más pudo usarse.


Fragmento de El guardián...

3. Sobre el tema.

¿Conoces esta película?:





1. Contesta a estas preguntas hechas por una internauta y di si estás de acuerdo con las afirmaciones hechas por quienes le responden.



Sociedad.

La razón por la cual esta obra sigue vigente es que logra permearnos en el mundo de una vida solitaria y extrema: la aventura de Holden Caulfield. Nos muestra una visión de la realidad de una persona que ha perdido la confianza y el agrado por la gente que le rodea y la sociedad en general. Hay velada ahí una crítica a la sociedad. La obra no es obscena: simplemente impacta por su contenido de crítica social. Por lo demás, no existen en la novela referencias hacia el asesinato o la disolución social. Es más: conviene no olvidar que el protagonista no es un desarraigado absoluto: el cariño hacia su hermana permanece y le hace incluso cambiar de conducta. De hecho, Holden es la figura de alguien desengañado por la vida, la cual acaba de conocer como adulto en forma de múltiples decepciones, pues se han corrompido aquellas cosas que más amaba (sus hermanos, su profesor, el disco, etc.). Sin embargo, es su hermana pequeña aquello por lo que aún merece la pena vivir, ya que todo le falla menos ella.




 2. La que tenemos aquí arriba no es más que una de las muchas películas que tienen que ver con las ciudad de Nueva York. ¿Conoces otras? ¿Qué imagen tienes de esa ciudad? Di qué sitios conoces de allí y qué actividades crees que se puede hacer en la Gran Manzana.

Nueva York.

La ciudad aparece como un personaje más. Holden la conoce como la palma de su mano y se mueve por ella, casi siempre en taxi, como pez en el agua, no obstante su corta edad. Así nos lleva por el parque, los museos, las calles, cuyas denominaciones (nombres o números) conoce incluso más allá de los suburbios. Nos presenta, asimismo, salas de fiestas, bares, teatros, restaurantes y escenarios propios de la vida adulta. Moviéndose por las calles de Nueva York, Holden parece más un perro viejo que un adolescente perdido.


3. Recuerda o busca en Internet películas o series que tengan lugar en esa ciudad.
4. Lee este fragmento y di cómo actúa Holden en lo que se refiere a:
  • Dinero
  • Música
  • Alcohol
  • Sexo
Alcohol y sexo.

Allá donde va, el joven trata de obtener consumiciones de whisky u otras bebidas alcohólicas, aunque casi siempre se la deniegan, al ser evidente que se trata de un menor de edad. En su actitud ante el alcohol y otros vicios, Holden se comporta siempre como los viriles actores de las películas de cine negro de los años cuarenta y cincuenta: Humphrey Bogart, Brando, etc.; sin embargo, logra que el lector no lo perciba como una pose forzada, sino como un atributo de su desengañada personalidad. Holden reconoce ser virgen y, sin embargo, no vacila en contratar los servicios de una prostituta, a la que finalmente rechaza sin demasiados titubeos; a cambio, su virilidad queda aparentemente a salvo gracias a la entereza con que encaja los golpes del portero matón.



5. Aquí puedes ver una escena de un clásico del cine. Esta sí la conoceréis, ¿no? 

En el cine (especialmente el americano) de mediados del siglo XX , vemos personajes que fuman y beben constantemente, hecho que se ha visto como un modo muy eficaz de hacer publicidad de esos productos. Más tarde, se han tomado medidas gubernamentales para evitar dar una imagen positiva de los mismos. Lee este artículo y razona por escrito si, en tu opinión, esas medidas son necesarias o inútiles.

 
Teatro, cine y música.

El jazz es un arte propio de intelectuales que se pone de moda en los años cincuenta. Aunque Holden ha sido expulsado del colegio, muestra siempre una predisposición muy buena hacia las artes y la cultura. A menudo habla de cine y de música como un experto capaz de discernir lo verdaderamente bueno de aquello que el público consumista se traga sin digerir. Suele reflejar los comentarios estúpidos con los que el público alaba a los artistas famosos. Afirma que odia el cine, pero lo cierto es que sabe apreciar una obra de calidad. Holden cita con frecuencia nombres de artistas, cuya trayectoria conoce, al parecer, de antiguo, a pesar de su corta edad, y se queja de los que, conscientes de su éxito e incluso de su valía, caen en un comportamiento de divos que lo alejan de la sinceridad necesaria para los verdaderos artistas.



Literatura.

Holden es un gran lector o, al menos, un lector ávido. Aunque El guardián entre el centeno trata de respetar la verosimilitud de los gustos y preferencias de un muchacho de la edad de Holden, con frecuencia aparecen en la novela críticas literarias (Adiós a las armas, por ejemplo, novela escrita en 1929 por Ernest Hemingway) puestas en boca del protagonista, que comenta los títulos de su agrado. Por otra parte, uno de los primeros rasgos autobiográficos que nos ofrece el protagonista es la relación con su hermano, escritor que "se ha vendido" a Hollywood: allá obtendrá una bollante posición económica y social, con todo tipo de lujos y decadentes placeres, pero esa elección lo aleja irremisiblemente de su hermano, el cual desprecia semejante actitud tanto como a quienes no hacen más que hablarle de aquél.



6. ¿Recuerdas qué importante obra de los Siglos de Oro incluye también críticas literarias en boca de los personajes? - Se trata del famoso escrutinio que el cura y el barbero hicieron en el patio de cierta casa manchega...
 



Cultura.

Además de la Literatura y las otras artes, Holden se interesa por otros aspectos de la cultura. Una mañana se acerca al museo de Historia Natural de Nueva York, con la excusa de ir a ver a alguien, aunque sabe perfectamente que esa persona no se encuentra allí. Finalmente se dará la vuelta antes de entrar, e incluso expresará su repulsión a hacerlo, pero antes de volverse nos narra una gran cantidad de recuerdos agradables evocados por aquellas vitrinas llenas de objetos interesantes, conocidos de sobra por él.

Por otro lado, la relación con la cultura se asemeja muchísimo a la actitud propia de los artistas de la Beat Generation y otros intelectuales asociados: se trata de un acercamiento diferente al oficial, marginal y voluntariamente provocador, con grandes dosis de excentricidad y contradicción, y para nada pulcro: como Kerouak y los demás, Holden es bebedor y está muy interesado por el sexo. De hecho, es éste el tema con el que trata de entablar conversación con el personaje que él considera más intelectual de todos: Carl Luce, tres años mayor, muy inteligente y con un vocabulario que admira abiertamente. Luce se comporta con Holden de manera muy despectiva; apenas le dedica tiempo, a pesar de que Holden le suplica su atención y su ayuda, y se niega a seguir la conversación. Aún así, Holden se despide de él con admiración: "¡Qué tío, el tal Luce! No había quien le aguantara, pero la verdad es que se expresaba estupendamente. Cuando estábamos en Whooton él era el que tenía el mejor vocabulario de todo el colegio. De verdad. Nos hicieron un examen y todo." Carl Luce se muestra, pues, tan despreciable como otros personajes que Holden acribilla, pero, al menos, no es un ser falso; además, sus méritos intelectuales parecen eximirlo de toda culpa.




Leer capítulo 19

7. Después de leer el capítulo 19, en el que Holden se encuentra con Luce, compara la actitud de este personaje con la de los escritores de la Beat Generation; después, recordando que este grupo de escritores fue precursor del movimiento hippie, halla la huella de aquéllos en las actitudes y objetivos de personajes como John Lennon: 



Lee este artículo y da tu opinión sobre el evento.




El ocio.

Caso muy diferente del de la cultura con mayúsculas es el de los espectáculos y actividades de ocio. Holden acude a tales espectáculos como un ritual para relacionarse con otra gente (como cuando lleva a Hayes al teatro), pero los desprecia abiertamente y sin reservas. Por las páginas del libro aparecen además otras actividades como las de la pista de patinaje, el parque o las salas de fiestas, lugares propios de la sociedad de consumo de masas, donde la gente se amontona para entregarse a actividades despreciables y hablar de los temas insustanciales que asquean a Holden.

8. Lee el capítulo en el que Holden se encuentra con su hermana, Phoebe. Distingue las partes del texto haciendo un brevísimo resumen de cada una de ellas.
 


Sinceridad.
 
Holden desprecia los convencionalismos sociales, los gestos cotidianos que, faltos de sinceridad, no son más que normas de educación o actos de conveniencia. A menudo se queja  de las palabras que, como "fantástico" o "estupendo", emplean los personajes con los que se encuentra y con las que éstos  aparentan siempre actitudes positivas ante la vida y ante los demás. Cuando Holden acude a un concierto o a una representación teatral, no puede evitar ver, tras los actores y los músicos y las poses con que estos se muestran, a la gente común que está deseando fumarse un cigarrillo o hacer descansar los pies en cuanto termine la representación. El joven aborrece cuanto el espectáculo tiene de falso, de pose y de representación.
A Sally Hayes, la chica con la que sale en New York, le propone en un momento dado casarse con ella, viajar y disfrutar de la vida; ella, como le dirá más adelante "le da cien patadas", pero el joven insiste en repetirnos que, en el momento de hacerle esa propuesta, de verdad estaba sintiendo lo que decía; es sólo que se trataba más de un deseo que de una proposición seria. Por eso Holden no tiene problema en hablarle al final en términos muy duros y expresarle su desprecio, mezclado con compasión y también arrepentimiento por al trato infligido.


Fantasías e ilusiones.

A menudo el protagonista proyecta sus deseos y sueños sobre la realidad circundante, como en el caso anteriormente expuesto, en que fantasea con la idea de vivir tranquilo con Sally Hayes y recorrer el mundo, o, con mayor dosis de irrealidad, se imagina a sí mismo como un pistolero vengador que encaja dos balazos en el cuerpo del portero proxeneta que acaba de robarle y golpearlo. A este tipo de fantasías pertenece la imagen que da título al libro.



La infancia
 
Holden ama la infancia porque está libre de la hipocresía y del protocolo de los adultos. El choque de esa inocencia y espontaneidad con la realidad que habitualmente lo circunda le provoca graves crisis de nostalgia y desilusión contemplativa. Su hermana Phoebe, que tiene solo diez años, es para él una referencia de más peso que cualquier adulto, y su único cariño absoluto. Bien es verdad que Phoebe posee una madurez y una lucidez propias de un adulto, pero es la sinceridad infantil lo que la convierte, a ojos de Holden, en un ser infalible, en el cual se puede confiar.

 9. ¿Piensas que el autor de esta canción tiene algo en común con Holden? ¿Por qué?




Letra aquí. Música aquí.



Religión.
 
A veces aparece la religión como un tema de menor importancia. El chico lo vive casi como un capricho de algunos sectores de la sociedad, los cuales parecen defender su credo como una seña de identidad, equiparable al estatus social, las preferencias musicales o la universidad en la que han estudiado otros. En cambio, Holden se revela como un ser espiritual cuando trata de conversar con Luce sobre sexo: ahí nos explica que rechazó a la prostituta porque él busca en el sexo una suerte de unión espiritual que se una a la comunión física.



Lee la letra de la canción en su original en inglés y traducida al español.

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